viernes, enero 25, 2008

Con todo temporeros denuncian abusos por parte de empresas agrícolas

Una agitada mañana se vivió en el centro de Copiapó debido a que un centenar de temporeros iniciaron un paro de actividades en miras de hacer valer sus derechos laborales, solicitar un salario ético y exigir a las 127 empresas agrícolas de la Región de Atacama que les brinden un trato humano, con la finalidad de que se “terminen las injusticias en que incurren estas productoras tales como despido masivo arbitrario, intoxicación alimenticia y abusos sexuales contra las mujeres”, según señalaron algunos de los participantes de la concentración, a lo que se agrega que las agrícolas no cumplieron un acuerdo suscrito el 14 de diciembre de 2007 por la Asociación de Productores y Exportadores Agrícolas del valle de Copiapó (APECO), que se comprometía brindar un trato humano a los trabajadores.
Las actividades de los manifestantes comenzaron a las siete de la mañana en Los Loros, Amolanas, Santa Gemita y Nantoco, este último lugar fue donde los congregados eran vigilados por un contingente policial “vestidos para la guerra” y provenientes de Valparaíso, el cual reaccionó de “manera violenta” cuando los temporeros comenzaron a gritar a los trabajadores que iban en los buses hacia su laboro que se plegaran a la marcha, grito que fue escuchado ya que muchos obreros se bajaron de los transportes para unirse a la manifestación.
Debido a esto, el accionar “represivo” de los efectivos dejó un saldo de doce detenidos, todos identificados como dirigentes sindicales, entre los que destaca Javier Castillo Julio, representante nacional de la Confederación Minera de Chile, el cual señaló: “Me detuvieron por defender a un compañero que estaba siendo violentado por Carabineros. Esto aconteció cuando Carabineros comenzó a exigir que las personas les mostraran las mochilas, nosotros intercedimos diciéndoles que no tenían que complicar la situación y preferimos mostrar los bolsos y dentro de eso vinieron tres Carabineros que comenzaron a violentar a un compañero y por defenderlo me tomaron detenido”.
El dirigente detenido también argumentó: “Nosotros no hicimos ningún desorden, todo estaba bien hasta que Carabineros empezó a provocar para evitar que se siguiera concentrando gente. Con los Carabineros locales hemos tenido muy buen trato, pero con el contingente de Valparaíso no mediaban razones y ellos llegaron como fuerzas de choque dispuestos a romperlo todo. Hubo agresiones, pero nosotros no reaccionamos”, lo que sirvió para que la protesta prosiguiera de manera pacífica.
Este relato concuerda con el entregado por la también detenida Claudia Álvarez, representante de los temporeros, quien indicó que las fuerzas policiales “llegaron y nos llevaron simplemente. Nunca explicaron porqué nos detuvieron, sólo nos llevaron y, mas encima, a mi compañera la golpearon, hubo fuerza desmedida de Carabineros, sobre todo los que llegaron a Nantoco, los cuales iban a la lucha. Nosotros no estábamos haciendo nada y fuimos reprimidos por Carabineros”.
Debido a lo ocurrido en Nantoco, la manifestación siguió frente a las dependencias de la Segunda Comisaría en Copiapó donde los manifestantes, a través de diversas consignas, solicitaban la liberación de los “injustamente” detenidos dirigentes, entre los que se incluía una hermana de la Pastoral Campesina, miembro activo del sindicato de trabajadores temporeros, identificada como Donata Cairos, lo cual motivó la llegada del obispo Gaspar Quintana para intermediar por ella y lograr que no fuera formalizada por la fiscalía, ante lo que logró su cometido.
En la oportunidad, el obispo manifestó: “Ella participa en el sindicato y el desenlace de su caso es que le han dado la libertad, pero lamentó que no se hayan cumplido las normas del convenio que se hizo con los trabajadores. Lamentablemente porque esto ha generado una situación dolorosa, un poco violenta y creo que habría que volverse a replantear el asunto para que esto no se convierta en una cosa más grave y que tenga repercusiones de otra clase”.
Posteriormente, los manifestantes se trasladaron del frontis de la comisaría para posicionarse fuera de la intendencia Regional ubicada en el edificio Pedro León Gallo, donde se formó una primera instancia de negociación entre los representantes de los temporeros y las autoridades de Gobierno encabezadas por el Intendente (s) Armando Flores, quien estaba acompañado por el seremi del Trabajo, Claudio Hurtado, y por el Gobernador (s) Elson Cursante, esto debido a que las primera autoridad de la Provincia se encontraban efectuando una inauguración en Caldera.
En la oportunidad, se llegó al acuerdo de conformar una mesa de diálogo donde hubiesen representantes de ambas partes y se trabajará sobre la base de una nómina de empresas donde se estipula el tipo de irregularidad en la que incurre cada una, aunque los representantes del Gobierno indicaron que “es muy difícil que se reúna a representantes de las 127 empresas agrícolas”, por lo que no se descartó la prolongación de las manifestaciones.

fuente : Diario Chanarcillo